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jueves, 24 de febrero de 2011

MEDITACION





Bhagavan enseñó su técnica del Yo, concentrándose primero en uno, averiguar quién es uno, descubrir el propio Yo al indagar en su búsqueda interior. Lo único inmortal y permanente en nosotros es el Yo, eso es lo que debemos encontrar. Consideraba Bhagavan a la Realización del Yo como la máxima ayuda que se puede dar a la humanidad. La técnica tiene que hacerse en un lugar tranquilo, cómodamente sentados y relajados, entonces iniciar la búsqueda: ¿De dónde vine Yo? ¿Quién soy Yo? La mente se apacigua marchando a la búsqueda de la fuente del pensamiento del Yo. ¿Soy Yo acaso este cuerpo o sus funciones? ¿Soy mis emociones o pensamientos? ¿De dónde vienen los pensamientos que ahora tengo? ¿Quién soy Yo en este instante? ¿Dónde me encuentro? No soy el cuerpo, no soy las funciones del cuerpo, no soy los sentimientos, no soy los pensamientos. Entonces ¿Quién soy Yo? Sus discípulos le preguntaban cómo se logra encontrar y saber quién es el Yo. Bhagavan les respondía: Yo Soy. Averigüen por sí mismos quienes son. Todo lo que se necesita es averiguar el origen del Yo y quedarse allí. Busquen lo eterno que no es reconocido como tal por la ignorancia. Al indagar con paciencia ¿Quién soy Yo? llega el momento en que se descubre la Verdad. El Yo es Conciencia Pura, la finalidad de la indagación del Yo supera la repetición de cualquier mantram, por estar enfocada la mente en su propia Fuente. Así lo enseñó Bhagavan.

Krishnamurti señala que para meditar: Se debe permanecer tranquilos, sentados sintiéndose cómodos, cerrando los ojos. En esa quietud comenzar a vigilar los pensamientos como un espectador de los propios pensamientos que van surgiendo. Ver cómo un pensamiento corre detrás de otro sin preocuparse si es bueno a no, sin intervenir, sin corregirlos, sólo vigilándolos. Una vez que se comienza a aprender observando los pensamientos, el aprender no tiene fin. Se deben observar los pensamientos que van surgiendo, seguirlos, investigar por qué surgen, pero sin tratar de modificarlos. Hacerlo sin esfuerzo, cuando uno surja no rechazarlo, sólo observarlo y se llegará a tener una percepción y una conciencia activa en el acto de ver cada pensamiento y cada clase de sentimiento. Se llegará a conocer hasta los pensamientos más profundos y secretos con sus motivos, sin distorsionarlos como correctos o incorrectos, como buenos o malos. Al seguir indagando cada vez más profundo en los pensamientos que surgen, la mente se vuelve sutil y sensible, está contemplando despierta, se ha logrado penetrar en el silencio de la mente, cada vez más profundo, cada vez más lejos.

Mientras daba una conferencia en Poona, India, el 10 de octubre de 1948, J. Krishnamurti se refirió a la meditación: Sin conocimiento propio, ningún problema humano puede ser permanentemente resuelto. Un hombre que está comprometido en un sendero, en un enfoque en particular, es incapaz de flexibilidad, y aquello que no es flexible se rompe. El comprenderse uno mismo es imperativo, porque sólo el conocimiento propio puede resolver los innumerables problemas que se nos plantean; y no podéis abordar el conocimiento propio por ningún sendero en particular. Necesitáis comprensión integrada y no atención especializada. Para que haya atención plena, vuestra mente no debe estar distraída; y puesto que vuestra mente lo está, ¿por qué no seguir las diversas distracciones y descubrir? Si hacéis eso, veréis con cuán extraordinaria rapidez la mente se vuelve sutil, intensa, despejada y vital. Pensar un pensamiento hasta el final es tarea ardua y muy pocos están dispuestos a hacerlo. Lo importante es el descubrimiento de cómo el pensamiento se engaña a sí mismo; y cuando descubrís su falsedad, entonces podéis enfrentar lo que es. Sólo entonces lo que es revela su plena significación, su sentido. Quien ve las cosas claras no puede evitar el exponerlas claramente.


Yo no quiero un "ashram" por la sencilla razón de que vosotros sois más importantes que el "ashram". Seguís a los "gurús", formáis comunidades e inevitablemente ellas fracasarán, porque el instructor llega a ser de suprema importancia y no vosotros. Si buscáis la verdad, jamás ingresaréis a un "ashram" y jamás tendréis por referencia a otra persona. Queréis que algo ocurra para cambiar, y sin embargo no consideráis el problema. Sólo puede haber un milagro cuando estáis dispuestos a recibir ese milagro. Veos a vosotros mismos, en cambio, tal cual sois, y descubriréis qué cosa extraordinaria ocurre. Lo que cambiará vuestro duro corazón es el ver las cosas tal como son. Cuando veáis y reconozcáis que vuestro corazón es duro, que vuestra mente está llena de juguetes infantiles; cuando lo reconozcáis, veréis ocurrir una transformación. Debéis tener la intención y miraos a vosotros mismos, y daos cuenta tal cual sois. A medida que os volváis perceptivos, veréis ocurrir un milagro que jamás habríais sospechado, un milagro que es la verdad, que transforma, que libera.

Sólo podéis investigar qué es la meditación cuando nada deseáis. Una mente meditativa es una mente que se conoce a sí misma, lo cual significa que la meditación es el principio del conocimiento propio. No podéis meditar sin conoceos a vosotros mismos. La meditación por lo tanto, es el comienzo del conocimiento propio, que consiste en conocer las actividades conscientes y también el contenido total de las capas ocultas de la mente. Todo pensar es del tiempo. Si queréis comprender un problema humano, no tiene que haber proceso de pensamiento, y el librar a la mente del proceso de pensar es meditación; y no podéis meditar sin conocimiento propio. Sólo cuando hay conocimiento propio, del que la meditación es el comienzo, la realidad se manifiesta; y es la realidad lo que libera. Eso es Meditación para Krishnamurti.

Rajneesh nacido en India en 1931 señala que la Meditación no es un método hindú ni una técnica o un arte, es un producto que surge del vivir total, no es algo que se agrega a lo que uno es, es el florecimiento total de la personalidad. Se debe evolucionar hacia la Meditación, no esperar que la Meditación sea entregada. La mente no es por sí meditativa, debe cambiar antes que la Meditación tenga lugar. La mente todo lo verbaliza, ello entorpece la plena vivencia de la experiencia. Por ejemplo, cada rosa es algo nuevo, completamente nuevo, nunca antes ha sido ni volverá a ser, al llamarla rosa matamos lo nuevo con una vieja palabra. La existencia es joven, todo lo que nos rodea es joven, el lenguaje que lo expresa es viejo. Meditar significa vivir sin palabras, ver las cosas sin verbalizarlas, transformarse en amo del mecanismo de la mente. Cuando en pleno estado de conciencia desaparece la barrera del lenguaje, estamos meditando. Lo primero es estar consciente de los procesos mentales y cómo la mente funciona. En la mente entre dos palabras o pensamientos siempre existe un espacio, una brecha, al estar alertas se lentifica la mente, ampliándose la brecha existente entre los pensamientos. Si se ven los espacios no pueden verse las palabras. Hay un intervalo, cuando se conoce ese intervalo o espacio vacío, se está en él; permanecer en esta brecha en estado consciente es Meditación. El estado inconsciente, la modorra mental del mantram, la autosugestión, en los que no hay palabras, no es Meditación por no estar conscientes y alertas de la brecha. Para encontrarla hay que ser un buscador y no un discípulo. La Meditación viene hacia uno, se acerca a todos los que están preparados, receptivos y buscando. No se debe aprender de otro, la mente siempre busca lo más fácil, en forma peligrosa se explota la premura espiritual, no buscar gurús, no pedir mantram, el mantram es sugestión que puede ser útil para la salud física y el equilibrio mental, pero no es Meditación. La Meditación surge de la propia profundidad interna, no pregunten cómo meditar, sí pregunten cuáles son los obstáculos por los que no se está en estado meditativo. La Meditación es el esfuerzo para saltar al inconsciente, es un salto a lo desconocido, no se puede realizar pensando. Para trascender es necesario aceptarse como se es, permanecer conscientes de lo que se está haciendo y no reprimir nada. En un mundo caótico deben usar técnicas caóticas. Las técnicas tradicionales de meditación parecen haber pasado por alto los condicionamientos humanos, no en vano han fracasado tan estrepitosamente. Así habló Rajneesh. Esta técnica él la llama Meditación Dinámica.

Maharishi Mahesh Yogi recibió en la India de su Maestro Swami Brahmananda los fundamentos de la Ciencia del Ser y el Arte de Vivir, del Ayurveda junto con la técnica de Meditación Trascendental y la misión de entregarla en Occidente para ser difundida y estudiada bajo el nombre de Ciencia de la Inteligencia Creativa cuyo aspecto práctico es la Meditación Trascendental que se recibe en un curso donde individualmente un instructor en una ceremonia entrega el mantram de acuerdo con el grupo de edad de la persona. La repetición del mantram aquieta la mente y uno se interioriza. El mérito de Maharishi fue el de llegar al lugar correcto en el momento adecuado. Su método se popularizó y extendió al final de los años ´60. A su vez logró que científicos lo estudiaran, demostrando la ciencia lo que el estado de meditación es: Un estado natural de consciencia.

No existe la fácil y rápida técnica milagrosa que tantos buscan como a la fuente de vida, todas son útiles si uno vibra con ella. Los resultados de meditar corresponde a la constancia, forma de realizar el método y motivación que lleva a hacerlo. El método va desde el nivel consciente hacia el subconsciente. Los resultados se materializan desde el subconsciente estimulado hasta el consciente, desde el mundo interior hacia el mundo exterior.

Estando una persona en alfa cerebral la visualización creativa desencadena los poderes latentes, la Fuerza que todos tenemos y que todos podemos manifestar. Acepto los beneficios de la Meditación y comparto lo afirmado por Rajneesh en cuanto al fracaso de las técnicas en el sentido que de cada 100 iniciados, 50 abandonan rápido, 40 más adelante y pasado unos años sólo queda 1 constante. Toda meditación correctamente llevada conduce a la meta en el estado superior de conciencia meditativa o trascendente, al que se llega por la brecha o el silencio de la mente despierta, mente en alerta en descanso. La Sagrada Tradición destaca los beneficios de la Meditación y nos dice que en la interiorización es aconsejable reforzar cualidades que nos hacen falta. La mente no puede dar cabida en forma simultánea a dos pensamientos opuestos. Esta característica de la mente podemos aprovecharla en el propio beneficio anulando lo negativo de nuestra personalidad al reforzar lo positivo. Todos los métodos o técnicas benefician al mediante constante, siendo la constancia el factor fundamental para logra los beneficios de la técnica. Sin embargo el abandono de la metodología es una realidad, ¿Qué pasa? ¿Será acaso que en la moneda de la vida que tiene dos caras, la exterior que ejerce tal fascinación y poder que somos incapaces de mirar la otra cara que es interior? La cara exterior nos liga y somete por los sentidos a sus densas vibraciones, la cara interior nos desliga y libera ofreciéndonos en nuestra libertad ser mejores y mirar hacia la Luz.

Se han realizado estudios en meditantes, el electroencefalógrafo ha permitido graficar la actividad eléctrica del cerebro con cuatro tipos de ondas cerebrales: Alfa, Beta, Theta y Delta y una variación Beta propia del acelerado mundo moderno, llamada Ram alta por su alta frecuencia y caos o desorganización cerebral. Se adjunta una tabla explicativa:

Ondas Cerebrales Estados de Consciencia


Beta 12 a 28 Hz Procesos conscientes. Vigilia.
150 - 200 Enfoque externo activo y apegado. Estado racional - analítico
microvoltios pensamiento y concentración.
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Ram Alta
más de 28 Hz * Estado se estrés y confusión
más 200 * Escuchar música densa, moderna estridente
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Alfa 7,5 a 13 Hz Procesos conscientes. Enfoque interno. Relajación no vigilante
100 - 150 Pensamiento ensoñador o ... fantasía realista o ... calma y
microvoltios quietud, no pensamiento
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Theta Puede sentir experiencias. Enfoque interno inactivo y ausente
3,5 a 7,5 Hz (no apegado) Receptivo experiencias hipnóticas Sueños en
50 - 100 pensamientos e imágenes Memorias de eventos pasados
microvoltios Estado intuitivo - creativo.
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Delta 0,2 a 3,5 Hz Sueño profundo Foco interno Corte con el mundo extermo
10 - 50 Pensamientos lentos Pérdida de control de los procesos mentales.
microvoltios
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Pues bien, el E. E. G. (electroencefalograma) permitió graficar neurofisiológicamente la existencia de los cuatro estados de conciencia del hombre, los tres tradicionales como la vigilia, el dormir y el soñar y el "nuevo" estado el trascendente o de meditación. Ha sido gracias a la moderna tecnología, como lo señalaron los enviados llegados de Oriente, que se demostró la realidad de los positivos efectos de la Meditación en el organismo y la conducta del meditante y se "descubrió" que era un estado más de conciencia humano. Jung y otros psicoterapeutas de su época, plantearon, sobre la base de la observación clínica, la existencia de dos mundos, de dos formas de conocimientos en el hombre, uno orientado hacia el Mundo Exterior y el otro dirigido hacia el Mundo Interior. Sperry demostró la existencia de los dos cerebros en el hombre con dos conciencias. Nos conectamos al mundo exterior por la prioritaria acción del cerebro izquierdo y al mundo interior por la prioritaria acción del cerebro derecho. Yogi Ramacharaka opina: La mentalidad de Oriente es tan unilateral como la de Occidente. La primera se preocupa del "Yo soy" sin considerar el "Yo hago". La segunda se satisface con el "Yo hago" sin preocuparse del "Yo soy". El progreso de la humanidad depende de la armónica combinación del método de la Actividad del occidental con el de la Idealidad del oriental, a fin de lograr el equilibrio entre lo material y lo espiritual.



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