LIBROS -

domingo, 6 de noviembre de 2011

Lao-tze

Vacíate de todo.
Deja que la mente descanse en paz.
Diez mil cosas suben y caen mientras
el Yo las observa regresar.
Crecen y florecen y luego regresan a su origen.
Regresar al origen es inmovilidad, que es el camino de la naturaleza.


El camino de la naturaleza es inmutable.

Conocer la constancia es sabiduría.
No conocer la constancia conduce al desastre.
Conociendo la constancia, la mente está abierta.
Con una mente abierta, tendrás abierto el corazón.
Al tener abierto el corazón actuarás admirablemente.
Al actuar admirablemente, alcanzarás lo divino.
Al ser divino, serás uno con Tao.
Ser uno con Tao es eterno.

Y aunque el cuerpo muere, el Tao nunca desaparecerá.